La distancia como mayor enemigo o amigo...

 

La distancia como mayor enemigo o amigo...

En la vida hay varias cosas que duelen y que perduran cierto tiempo en nuestro ser. Una de ellas es la distancia, aquella que atormenta y es tan latente... o qué también, puede ser todo lo contrario.

El amor siempre podrá cruzar fronteras mientras que la distancia se queda fuerte en su sitio. Se puede acortar con ciertos gestos o también se puede agrandar con la ausencia de estos.

Nunca me había tocado sentir tan fuerte la distancia, tal vez por que no entraba en ese rango de personas que lo hacen o simplemente no había crecido lo suficiente para empezar a ver por nuestro futuro y tener que hacer ciertos sacrificios hoy en día para que en un futuro, las cosas mejoren.

Si manejamos el amor de la misma manera en que se hacia mientras se encontraba en el mismo lugar, podría ser un poco complicado, desde luego, las cosas cambian, las palabras se reemplazan, los cuerpos se mueven y los paisajes son otros. Pero claro, se puede conservar esa esencia que te caracteriza, que los caracteriza y tratar de mantener ese nido que te une a esa persona especial. 

La clave es no perder tu individualidad nunca, conocerte tan bien que tengas la claridad suficiente para saber quien eres, quien estas siendo y quien vas a ser, sin esto, podemos acabar donde no nos gustaría, confundidos, sin saber que cual es el camino y tal vez con un poco de desolación. Mantén tu armonía y estabilidad en todo momento. 

Porque la distancia en el amor puede ser derrumbante o también exitosa... todo implica el sentido que busques y quieras darle.

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